MODA EN LOS DETALLES.

El vestido de novia es sólo el comienzo de la aventura que supone completar el look nupcial. Y es que, la mayoría de las veces, es complicado saber por dónde empezar con los complementos. Menos mal que las tendencias marcan ciertas pautas (que una se puede saltar cuando lo desee) que arrojan algo de luz al mundo de las dudas e interrogantes en el que vive toda novia.

La moda apuesta por los pendientes XXL, los collares trendy y brillantes que, además de hacer resplandecer a la futura esposa, pueden cumplir con el papel de la tradición. Algo viejo, algo nuevo, algo prestado y algo azul. Así, puede que un accesorio de estilo barroco y tamaño generoso lleve generaciones en la familia y esta sea la ocasión para sacarlo a relucir. O también puede ser un fantástico regalo de los amigos. En cuanto al escote, las pasarelas están repletas de chocker y gargantillas que, si bien son apuestas algo arriesgadas, crean un efecto de lo más rompedor.

Para la lencería, las firmas más importantes se declinan por los bralettes (siempre y cuando se adapte a la forma del vestido). Son cómodos, románticos y muy estilosos por lo que resultan una opción muy interesante para vestir el interior el día de la boda. No va a ser algo que quede expuesto, pero la sensación de llevar una prenda sexy y elegante bajo el vestido procurará, sin duda alguna, una sensación de sensualidad absoluta.

En lo que se refiere al calzado, es fundamental primar la comodidad al diseño pero, afortunadamente, el mercado ofrece soluciones que combinan a la perfección estética y confort. El color fetiche continúa siendo el blanco pero también los pasteles y nude aportan un toque de luz y personalidad al conjunto. Sandalias planas, cuñas y tacones gruesos con joyas y encajes despuntan entre las preferencias de las pasarelas por lo que, si el vestido lo admite, pueden ser una opción muy acertada.

Otro de los grandes triunfadores son los blazer. Y es que esta prenda, tanto para cubrir los hombros por exigencias protocolarias o por requerimientos de las inclemencias climatológicas, se está convirtiendo en una pieza clave del look nupcial. Incluso, en algunos casos, dicen que está robando protagonismo al propio vestido! Con transparencias, volumen o incrustaciones de joyas, son perfectos para lucirse independientemente del lugar o del tiempo.  De igual manera, las estolas, boleros o chales cumplen este papel a la perfección.

El cabello de la novia es otro escenario donde la moda despliega sus alas. Más allá de las coronas de flores, que aportan un aire de lo más natural, están las tiaras que, en toda una variedad de diseños, logran convertir a la futura esposa en una auténtica princesa. La espectacularidad de algunas de ellas asegura el efecto deslumbrante de una diosa griega. Y, por supuesto, las más atrevidas pueden optar por los turbantes, tal y como proponen algunas firmas como Villais. El resultado: una imagen boho chic radiante y original.

Opciones hay tantas como la imaginación pueda trazar, pero el vestido de vuestros sueños es solo y únicamente uno. Para él debéis pensar en los accesorios que puedan ensalzar sus virtudes pero nunca restarle fuerza ya que  la función de los detalles es, precisamente, sumar e incluso multiplicar la energía y belleza  del look final. Y enamorar vuestros ojos ante el espejo y la vista de todo aquél que pose su mirada en vosotras. Por ese motivo, vale la pena, y mucho, dedicarle tiempo y paciencia.