PANTONES NUPCIALES.

Hablar de matrimonio supone hablar del vestido de novia pero también de un sinfín de elementos complementarios que darán color y vida al festejo. Y para que el efecto visual sea impresionante y estiloso, combinar las tonalidades de forma adecuada resulta crucial. El 2018 viene con algunas propuestas cromáticas especialmente únicas para animar y aportar luminosidad a cualquier boda.

Ante una paleta repleta de posibilidades, es necesario reflexionar sobre cuáles serán los colores que se desea utilizar para guiar el repertorio cromático del evento nupcial. Y no es fácil a menos que se tengan las ideas muy claras. Por eso, la moda, aunque no represente para nada la verdad absoluta, sí que resulta de gran utilidad para dar los primeros pasos en la elección definitiva.

Uno de los colores que cobran gran protagonismo este año es el ROSA, tonalidad romántica donde las haya y un clásico que será una de los matices más apreciados en los matrimonios del 2018. Los Pantone más importantes vienen todos en tono pastel, y abordan una escala que comienza en los más más claros, Blooming Dhalia y Almost Mauve hasta los de mayor intensidad como el Ash Rose y el Rapture Rose.

El LILA lavanda es otro de los grandes triunfadores de los Pantone para esta temporada. Delicado y también apasionado, permite aplicaciones de gran ligereza cercanas a un rosa muy sutil, como es el Pink Lavander, hasta intensas vibraciones violáceas que pierden toda timidez como es el caso del Ultra Violet, aderezado por una pizca de azul.

El AMARILLO no se queda atrás. Matices ligeros o más calurosos con marcada tendencia hacia el verde lima, que combinan a la perfección con el níveo toque del conjunto nupcial. Brillante y cálido como el Meadowlark o más divertido como el Lime Punch hasta el ligeramente verdoso Nile Green, todos ellos brindan luz y resultan aptos para cualquier complemento: tartas, flores, servilleteros…

Pantones que destacan en el panorama nupcial de este 2018 pero no tienen la última palabra. Una vez más, los gustos y personalidad de los novios serán las claves para determinar de qué color será el enlace. Un criterio que en ningún momento debe verse eclipsado por las tendencias. Al fin y al cabo una boda no debe responder a la moda sino al propio estilo.

 

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