NO LO HAGAS.

La búsqueda del vestido de novia es una de las grandes aventuras en la preparación de un festejo nupcial. Puede ser una tarea ardua pero colmada de ilusión que, finalmente, da forma a ese sueño tan perseguido en la mente y en la fantasía. Ahora bien, una vez que se ha hecho realidad a través de un modelo en particular, con todos sus detalles y accesorios, es importante detenerse. Y es que hay cosas que NO se deben hacer cuando se ha elegido ya el conjunto para la boda.

Para empezar, si la decisión ha sido tomada, lo ha sido con todas sus consecuencias por lo que continuar barajando opciones, ojeando revistas, contemplando escaparates, curioseando expos o navegando por internet queda totalmente prohibido. La razón no es otra que evitar que surjan dudas innecesarias que fácilmente pueden aparecer en un momento tan delicado y emocionante. Así que stop!.

Porque ¿quién quiere que se ponga en tela de juicio una decisión que le ha llevado un clara inversión de tiempo, energía y deseo?. Sería como hacer saltar por los aires todo ese esfuerzo simplemente por una sobrecarga de estímulos totalmente contraproducente. Es mucho más recomendable pensar que existen argumentos de peso que han guiado la decisión de forma correcta. Y confiar en ellos, que no es otra cosa que decir, confiar en una misma.

El otro gran error que puede cometerse al verse inmersa en toda la vorágine de los preparativos, la adrenalina, las prisas…etc es dejarse llevar por la intensa emoción de haber encontrado finalmente el vestido y desear enseñarselo a familiares, amigos…y vecinos! Por nada del mundo hay que desvelar este gran secreto de toda boda. Debe permanecer envuelto en ese aura de misterio hasta el mismísimo día del enlace para que el hechizo de la expectación permanezca inmutable.

De modo que ahora que te desborda el corazón porque tu sueño cada vez parece más real; ahora que tienes entre manos ese conjunto que supera todas tus expectativas; ahora que te imaginas verdaderamente caminando hacia el altar…continúa alimentando tu ilusión pero mantén tu boca sellada, tus manos quietas y respira hondo...No hagas nada…Sólo tienes que esperar al gran día!!!

Fuentes: matrimonio.it/leitv.it/blogdemariajose
Imagen: Pexels.